Esta no se me pasó. Arrastrando a toda la familia, pude asistir a la exposición de Alphonse Mucha en el Caixa Forum de Barcelona 🙂
Uno de los máximos exponentes de L’Art Noveau, y quizás, padre del Diseño Gráfico moderno, personalmente lo encuentro excepcional.
Checoslovaco de nacimiento y corazón, como demostró en su última época, estaba en la cumbre de su fama, en 1890, cuando realizó la mayoría de sus panneaux décoratifs y sus famosos carteles para el teatro. El «Estilo Mucha» se convirtió en sinónimo y obra del Art Noveau.
Las líneas sinuosas, los exóticos motivos florales y las hermosas mujeres de pelo infinito, junto con sus armoniosos diseños y delicados colores, le valieron la fama de uno de los mejores artistas gráficos de la Belle Epoque. Fué, sin duda un ilustrador innovador y de un talento impresionante.
El nacionalismo y la religión, fueron ejes que siempre centraron su trabajo, alcanzando sus mayores niveles al final de su vida, con la creación de la monumental serie «La Épica Eslava«.
Checoslovaquia, París (en su esplendor) y Nueva York, fueron testigos de su esplendor, y todos (bueno, todos no; la crítica Checoslovaca se lo cargó a la primera de cambio, pero bueno 🙁 ) se rindieron a sus pies cuando el público fue testigo de la aparición de su primer cartel publicitario de la obra de teatro «Gismonda» de Sarah Bernhardt.
Bueno, tampoco pretendo hacer un repaso de su interesante vida, que podreis encontrar en infinidad de libros y en no menos infinitas páginas virtuales; tan solo recomendar encarecidamente a quien pueda, que vaya, y que antes de ir, dé un repaso a su vida y obra, para poder apreciar las joyas que allá se exponen.